martes, octubre 31, 2006

¡Especial Halloween! Retro Directo a Video: Hechizo Letal (Lovecraft goes hard-boiled)

Quería hacer un post especial para conmemorar Halloween, pero, ¿de qué podía hablar? Forfy parecía haber cubierto ya todos los temas en su antológico III Halloween Especial. Ah, pero yo no soy de los que se rinden. Pensando en algo sobre autores clásicos de la literatura de terror, recordé una película que había alquilado en mis sesiones cinéfagas hace más de una década... y decidí que sería un tema perfecto para hoy. Con todos vosotros... ¡Hechizo letal!
¿Película de culto?
Hechizo letal, realizada para televisión en 1991 (por lo que nunca fue estrenada en pantalla grande, aunque quizá lo hubiera merecido), se sitúa en el Hollywood de un alternativo 1948, en un mundo en el que la magia se ha convertido en algo cotidiano que se utiliza desde cosas tan nimias como hacer que la coctelera se agite sola, hasta para matar a la gente. Todo el mundo utiliza la magia, con la única excepción del detective H. Philip Lovecraft (nótese cómo en la película le dan preferencia a su segundo nombre, que es también el nombre de pila del detective clásico hard-boiled Philip Marlowe), que la rechaza "por motivos personales". Lo que, en un mundo en la que los detectives pueden resolver los casos consultando una bola de cristal, no es muy bueno para el negocio. Eso sí, Lovecraft, interpretado colosalmente por el pétreo Fred Ward (seis años después de Remo, desarmado y peligroso, pero sólo un año después de Temblores y Henry & June), es un tipo duro que no está dispuesto a ceder, confiando en que el cerebro y el instinto valen mucho más que las runas y los hechizos.
Precisamente esta característica suya de no usar nunca la magia es la que le permite ser contratado por un millonario (interpretado por otro actor mítico, David Warner, el Jack el Destripador de Los pasajeros del tiempo, el malo de Tron, ¡joder, el puto Mal Absoluto de Los héroes del tiempo!) para que encuentre para él el Necronomicón, que al parecer le ha sido robado. Las cosas se complicarán cuando Lovecraft descubra que Tugwell, un gangster enemigo del hombre que le ha contratado, va también tras el libro, y que incluso ha contratado para conseguirlo a su antiguo socio (Clancy Brown, ¡el Kurgan de Los Inmortales!, que también os sonará como Kelvin Inman en la segunda temporada de Perdidos... oh, vaya, qué tonto, si en TVE aún no han llegado a ese punto), un tipo sin demasiados escrúpulos. Y, por supuesto, no falta la chica, interpretada por la entonces aún desconocida Julianne Moore (que hoy no necesita presentación y encabeza el cartel de las películas en que participa... como Hijos de los hombres, ¿todavía no la habéis visto?).
La película, estructurada como una clásica novela negra, mezcla, en un cóctel extravagante pero atractivo, el tono de los clásicos de Bogart (incluyendo réplicas cortantes, decorados de los años 40, cigarrillos, bourbon y mujeres fatales) con el desenfado de las películas fantásticas de serie B de los 80 (incluyendo duendes, unicornios, zombis, maldiciones, magia negra, ¡e incluso el mismísimo Cthulhu!), todo ello salpicado con unas buenas dosis de comedia. Dirigió el entonces ya veterano pero aún desconocido Martin Campbell (que luego llegaría a director de primera división con películas como Goldeneye, La máscara del Zorro y secuela, o la reciente Casino Royale; pero que también hizo, ¡ay!, Escape de Absolom), la producción corrió a cargo de Gale Ann Hurd (también productora, ojo al dato, de Terminator, Aliens, Alien nation, Abbyss y un montón de películas más, de las que las últimas´, sin embargo, han sido las lamentables Hulk, Punisher y Aeon Flux), lo que la hace todavía más estimable para frikis y mitómanos.
En suma, una película muy amena, repleta de referencias y guiños a la obra de Lovecraft y otros autores de género, una estimable serie B sin más pretensión que entretener y divertir, y que lo consigue. Quizá se podría haber aprovechado más el punto de partida y quizá se acuse cierta falta de presupuesto (a fin de cuentas, era un telefilme) para hacer unos efectos más deslumbrantes, pero se deja ver mejor que muchas películas que sí estrenan en el cine.
GENIÓMETRO: 3/5 ed woods

Como fue un éxito, tres años más tarde tuvo una secuela, también para televisión, Witch Hunt, ambientada en el mismo universo. Por desgracia, aunque repitió el mismo guionista (Joseph Dougherty, un profesional de las series de TV), cambió casi todo el equipo, Lovecraft fue en esta ocasión Dennis Hopper y la chica fue Penelope Ann Miller, y el resultado ya no fue tan bueno.

lunes, octubre 30, 2006

Las vidas cruzadas de Alex Robinson

Los seis protagonistas, en tecnicolor
Malas ventas (como se tituló aquí Box Office Poison), novela gráfica de más de 600 páginas, fue la obra que dio a conocer a Alex Robinson. Una obra coral, irregular (como corresponde a una obra que el autor fue realizando durante años, sin saber hacia dónde iba) pero con momentos realmente geniales (mi favorito, la historia que muestra cómo la convivencia entre los inquilinos de la casa donde viven los protagonistas se viene abajo cuando hospitalizan a la odiosa e insufrible casera, a la que desde ese momento no se puede evitar ver con otros ojos), que descubría a un autor con muy buena mano para crear personajes entrañables, excelente oído para los diálogos, un gran ojo para las pequeñas historias cotidianas de gente corriente y una estimable capacidad para jugar y experimentar con recursos narrativos. Tan monumental esfuerzo tuvo continuidad en Más malas ventas, que recuperaba a los personajes de su primera obra en una serie de historias cortas.
Ahora Astiberri ha publicado Estafados (no muy afortunada traducción de Tricked), su tercer y más ambicioso trabajo, que se hizo este año con el Premio Harvey a la Mejor Novela Gráfica. En ella vuelve a hacer gala de todas las virtudes que hacían brillar Malas ventas, pero dejando atrás los defectos. Esta vez Robinson ha tenido claro desde el principio la historia que quería contar y ha huído de las digresiones del original, centrándose en las trayectorias de seis personajes (una estrella del rock en crisis, una hija que acude a la ciudad en busca de su padre al que no conoce, un falsificador que no puede dejar de mentir, una camarera con problemas sentimentales, un fan obsesionado y perturbado, y una trabajadora temporal que se convierte en musa del primero) hasta el momento en que sus destinos confluyen. Una especie de Vidas cruzadas o de Magnolia, pero en cómic, confirmación de las capacidades de este autor. Una lectura muy recomendable.
GENIÓMETRO: 4/5 eisners

viernes, octubre 27, 2006

Mundo corto

El mundillo del cortometraje sigue pleno de actividad. Así que, a riesgo de hacerle un poco la competencia a esos referentes de la cortosfera que son La Tierra Prometida y El Zoom Erótico, voy a hacerme eco de un par de noticias...
Escorto ya se celebró hace más de un mes, pero no ha sido hasta esta misma semana que ha terminado la resaca. Ahora ya podéis encontrar en su página web un estupendo making of montado por J.M. Asensio, el último spot gentileza del Cineasta Regio y las crónicas, críticas y entrevistas del festival. ¡Eh, hasta me han hecho una a mí!
Además, se abre el ya también mítico Notodofilmfest, este año lo hace con un irreverente corto obra del imprescindible Jim-box, ganador el año pasado. Atentos pues...
¡Ah! Y ojito que se acerca el Festival Nacional de Jóvenes Realizadores Ciudad de Zaragoza. Será del 1 al 9 de diciembre. La selección ya está hecha, aunque todavía habrá que esperar unos días para hacerla oficial. Cosas de la burocracia municipal, ya sabéis... En fín, seguiremos informando...
Y ahora había pensado cerrar este post con un corto... pero, a la porra. Cualquier corto que me apeteciera poner por aquí merece un post por sí sólo. Si queréis ver cortos, podéis empezar por aquí, y tenéis para todo el día.
Ahora mismo prefiero poneros estos avances de una película que viene y con los que me reí un montón. La nueva de los creadores de Zombie´s Party. Seguro que vosotros también la vais a querer ver.

¡Es todo!

lunes, octubre 23, 2006

Año 2027...

La película del siglo
Cautivadora. Dolorosa. Tiene algunas de las mejores secuencias del cine del siglo XXI. Podría ser a esta generación lo que Blade Runner a la de hace veinte años. Y está ahora en los cines. Hijos de los hombres. Corred a verla. Ya.
GENIÓMETRO: 5/5 grouchos

viernes, octubre 20, 2006

Grandes del videoclip: Stephen R. Johnson


Pese a que su carrera apenas abarca un puñado de videos musicales, nadie puede negar que Stephen R. Johnson fue uno de los grandes nombres del género en los años 80, y uno de los autores que más influencia tendrían en la generación posterior (especialmente sobre el genial Michel Gondry, en mi opinión). Aunque también dirigiría videos de acción real, su especialidad era la animación stop motion. Seguir su trayectoria posterior a su época de videoclipero resulta prácticamente imposible incluso en estos tiempos de autopistas de la información, dado que sus huellas se entrenmezclan con las de otros varios Stephen Johnson que trabajaban en la industria, y, por si esto fuera poco, a veces fue acreditado con diversas variaciones en su nombre. No dio el gran salto a la dirección de películas que dieron otros autores, apenas he encontrado su participación como director en un capítulo de Pee Wee´s Playhouse, no estoy muy seguro pero creo que leí por alguna ignota web que abandonó el mundillo audiovisual para dedicarse al arte. Si alguien sabe algo, ahí están los murmullos.
Lo cierto es que la trayectoria de Johnson está llena de contrastes. Sus primeros pasos los daría con videos tan poco imaginativos como "Just another day" (Oingo Boingo, 1985), muy lejos del barroquismo que caracterizaría sus mejores trabajos; y los primeros aplausos los cosecharía con un video sin nada de animación, basado en el montaje: "Walk of life" (Dire Straits, 1985). Pero acto seguido sería llamado por David Byrne para que le ayudase a realizar uno de los mejores videoclips de los 80 (y, probablemente, de la historia), el impresionante "Road to nowhere" (Talking Heads, 1985), que sigue siendo uno de mis videos musicales favoritos de todos los tiempos.
DIGRESIÓN: No se puede, sin embargo, arrebatarle méritos a David Byrne por este video. Las "colaboraciones" entre un director y el líder del grupo en la dirección del video musical suelen parecerme sospechosas y, probablemente, más consecuencia de un ego hinchado que de una colaboración real. No es éste, sin embargo, el caso de David Byrne, que ha dirigido numerosos videos a lo largo de su carrera, tanto para los Talking Heads como para su propia carrera en solitario, e incluso ha dirigido tres películas, el musical True Stories (1986) y dos documentales. Entre sus trabajos hay videos tan destacables como el mítico "Once in a lifetime" (1981), "Burning down the house" (1983), "This must be the place" (1983), "Wild wild life" (1986), "Love for sale" (1986), el muy original "Nothing but flowers" (1988), "Don´t fence me in" (1990) o "She´s mad" (1992).

Pero volviendo a Johnson, éste viviría su momento de mayor gloria al año siguiente con la realización del impactante "Sledgehammer" (Peter Gabriel, 1986), con la gente de la Aardman echando una mano, que le valdría el premio al video del año de la MTV, y "Big time" (Peter Gabriel, 1986), en el mismo tono. A partir de aquí Johnson desaparecería del mapa una temporada, encargándose de realizar las cortinillas animadas de la MTV, que no serían menos influyentes.
Volvió a la acción con "Djapana" (Yothu Yindi, 1989), pero no sería hasta "Steam" (Peter Gabriel, 1992) que volvería a triunfar, con un trabajo de nuevo repleto de imágenes impactantes y en el que experimentaba con animaciones por ordenador. Lo último que hizo fue un video para "Is it like today?" (World party, 1993), de esta canción existen dos videos pero después de ver éste hay pocas dudas de que se trata del de Johnson (pese a que en el rótulo inicial que aparece lo atribuyen al autor de la otra versión), como también hay pocas dudas de que a Johnson no le dejaron hacer lo que quería: las imágenes marca de su estilo se ven relegadas a fugaces apariciones, y a veces incluso tapadas por los músicos superpuestos en primer plano. Quién sabe si no sería esto lo que le llevara a abandonar los videos musicales... En fin...

miércoles, octubre 18, 2006

Escarabajos

Uno de los coches más famosos del mundo
¿Quién no recuerda a Herbie? Fue uno de los más celebrados iconos que consiguió acuñar la Disney en la era pop, instalándose en poco tiempo en el imaginario colectivo y protagonizando una serie de películas. Antecedente molón del Coche Fantástico, Herbie era el inolvidable Volkswagen Type 1 (Beetle, o Escarabajo) blanco, con unas rayas rojas y azules y el dorsal 53 (si es que utilizar la palabra "dorsal" con un coche tiene sentido), que tenía su propia mente y grandes habilidades de conducción que le permitían ser un excelente coche de carreras.
Su primera aparición se produjo en Ahí va ese bólido (1968), donde ayudaba al éxito del piloto interpretado por Dean Jones pero se erigía en verdadero protagonista. Es en esta película donde Tennessee Steinmetz, el mecánico interpretado por Buddy Hackett, lo bautiza como Herbie, porque le recuerda a su tío Herb, un ex-boxeador cuya nariz rota tenía la forma similar al capó redondeado del coche. El coche adquiere muy pronto todo el protagonismo hasta eclipsar a los personajes humanos y hacerse la estrella de la función, destacando la escena en la que el malvado emborracha al coche y las maniobras torpes y posterior resaca que resultan.
En principio no iba a ser sino una más de las muchas películas para todos los públicos que producía la Disney, pero el éxito lleva a la Disney a volver a utilizar el vehículo en Herbie, un volante loco (1974), cuansdo la empresa atraviesa ya una de sus peores crisis creativas. Patrocinada por Volkswagen, que pretendía impulsar de nuevo sus ventas, seriamente afectadas por la crisis económica, en esta ocasión el coche ayuda a una viejecita a impedir que un malvado constructor le arrebate su casa para construir un gran centro comercial. Una historia muy típica, sí.
Aunque el resultado de la segunda no fue tan bueno, la falta de ideas lleva a Disney a seguir la serie con Herbie en el gran prix de Montecarlo (1977), que entronca directamente con la original, recuperando a Herbie como coche de carreras y a Dean Jones como su atribulado piloto, si bien en esta ocasión sería el histriónico cómico Don Knotts su mecánico. En esta ocasión unos ladrones ocultan unas joyas robadas en la tapicería de Herbie, que no se lo pone fácil para recuperarlas, mientras compite en el rally que da nombre a la película. Grandes momentos: Herbie enamorándose, Herbie enfadado con su piloto y obligándole a participar en un duelo de coches, Herbie bajando un puerto de montaña sin seguir la carretera... De crío, ésta era la que más me gustaba.
La saga se cerraría con la peor e insufrible Herbie torero (1980), en la que el coche corría aventuras por Méjico, donde un crío lo encuentra, le da el nombre de "Ocho", que obtiene de sumar las dos cifras de su número, y lo utiliza para trabajar como taxista. Sin comentarios. La Disney estaba muy mal en esta época, estaban haciendo cosas como "Todd y Toby" y en cambio rechazaban ideas como "Nimh". En fin...
Herbie todavía siguió en marcha un tiempo más, llegando a tener en 1982 su propia serie de TV... que sólo duró cinco capítulos. El Escarabajo parecía aparcado para siempre.
¡¡¡Ash y Herbie!!!
Pero no. Quince años después fue recuperado para el telefilme Ahí va ese bólido de nuevo (1997). No la he visto, pero tiene algunos puntos prometedores: A) que se centre en el mundo de las carreras, como las mejores historias del coche; B) que le enfrenten a Horace, un malvado doppelganger, otro Escarabajo viviente, rememorando míticos duelos como los de K.I.T.T. y K.A.R.R.; y C) ¡¡¡BRUCE CAMPBELL!!! ¡¡¡El puto BRUCE CAMPBELL como protagonista!!!, además del siempre efectivo John Hannah como villano y del veterano Dean Jones haciendo un cameo en el papel del piloto original de Herbie. Vamos, que me dan ganas de verla y todo: tiene pinta de ser una película de Herbie hecha por frikis.
Por desgracia, cuando han decidido volver a llevar al Escarabajo al cine en Herbie (2005), aparte de querer volver a contar la misma historia llevando al coche a la NASCAR, han cometido un error gravísimo, en vez de poner al volante a alguien con el carisma de Bruce Campbell han puesto a la sosa de cojones más cargante del cine yanqui actual, la inaguantable Lindsay Lohan. ¡¡¡POR FAVOOOORRRR!!! La película ha sido un fracaso... fuera de América, donde la sosa tiene un éxito tan inexplicable como arrollador. Si hacen una secuela, por favor, que se busquen a otra.

BONUS: OTROS FAMOSOS ESCARABAJOS
Dudu fue la respuesta alemana a Herbie, un Escarabajo amarillo trucado y computerizado, lo que le permitía incluso hablar. Vamos, el eslabón perdido entre Herbie y K.I.T.T., retened este dato porque la conexión Alemania-David Hasselhoff es significativa y da para unos cuantos chistes. Protagonizó cinco películas, pura comedia zetosa setentera: Superbug (1971), Superbug super agent (1972), Superbug the wild one (1973), The maddest car in the world (1975) y Superbaby (1978). He puesto los títulos que se utilizaron en su versión inglesa por mi propia comodidad, porque yo de alemán ni palabra, pero si pincháis os saldrán los títulos originales que supongo no tendrán demasiado que ver. (Un saludo a Dani WhiteCrow que fue el que me descubrió la existencia de Dudu, y que se lamentaba amargamente de no haber encontrado sus películas en la Mula. Tranquilo, Dani, el mes pasado editaron sus películas en DVD en Alemania, así que probablemente ahora podrás conseguirlas.)
Tengo un Escarabajo amarillo, que es lo que se lleva ahora...
Bumblebee era el autobot amarillo que se convertía en un Escarabajo en los Transformers, siendo el más juvenil e irresponsable de los personajes y el que pone en contacto a los robots con los humanos. Tras ser casi destruído, fue reconstruído en una forma más fuerte y madura, y sustituyendo el amarillo por un color dorado, cambiando su nombre por el de Goldbug. Burda excusa de una serie siempre a remolque de las decisiones de la empresa juguetera que fabricaba los Transformers, que fueron los que decidieron cambiar el diseño del juguete. Pero todo el mundo sabe que Bumblebee molaba más. Quizá por eso Goldbug volvió a ser Bumblebee más adelante, por mucho que, bien pensado, volver atrás no tenga mucho sentido.
Cómo transformar un robot en un coche

sábado, octubre 14, 2006

Aquellos discos míticos: Una noche en Malibú

Mira que dio mal este disco en su momento...
¡Vuelve la sección con la periodicidad más excéntrica del mundo de los blogs! Cinco meses después, otra vez he decidido ponerme a analizar uno de aquellos discos que marcaron a los de mi generación. En esta ocasión, el disco que llevó el duduá a la radiofórmula: Una noche en Malibú, de los sin igual Tennessee.
Los Tennessee eran un grupo madrileño atípico, por el tipo de música que hacían tan retro, por las pintas (a juego con la música), y porque en la época en que la imagen empezaba a vender más que el producto no era normal que una multinacional fichara a un grupo con un cantante de voz chillona con problemas de movilidad y la cara picada de viruelas. Tennessee pertenecía a toda una generación de grupos que en los 80 en vez de dejarse seducir por el post-punk, la new wave y la posmodernidad, tiraron por el lado del rock´n´roll clásico. El rockabilly, las cazadoras de cuero y los tupés a lo Elvis fueron las bases de nombres míticos como Loquillo y los Trogloditas, Los Rebeldes o Más Birras (¿cómo que no sabes quiénes son estos? ¡ya estás tirando ahora mismo del eMule, bandarra!), pero Tennessee, sin embargo, se centró más en las armonías vocales (habían empezado como grupo vocal porque no sabían tocar ningún instrumento) y se dedicó a un sonido incluso más clásico y retro, repleto de historias de amor adolescente en institutos americanos de los años 50 (sí, Grease les debió marcar... años después les llamaron para la grabación del musical en español), más cercano al más conservador y romántico tin pan alley que a la indomable rebeldía de los rockers.
Después de cuatro LPs para una compañía pequeña, Tennessee firmó con una multinacional para éste su quinto disco, que publicaron en 1990, y con el que consiguieron sus mayores éxitos. También tuvo éxito el posterior Llueve en mi corazón (1991), pero después del tropezón de Sueños (1992) salieron por la puerta de atrás y regresaron a las compañías pequeñas, donde aún grabarían cuatro discos más antes de separarse, el último en 1998 y ya sólo con dos de los componentes. Volvieron en 2004, haciendo lo mismo de siempre. Quizá un poco demasiado suavecitos y "políticamente correcto" para mi gusto, pero ganan por goleada a cualquier grupo nacional de radiofórmula de hoy.
Viviendo en la era swing
Y ahora, vamos con las canciones:
Una noche en Malibú: Hoy la ví con otro y no supe actuar, ya me lo advirtieron, esa quiere más. El tema que daba título al disco fue también el tercer single. Tema típico: historia de despecho por una mala mujer. Un tema suavecito con arreglos de viento.
¡Qué rollazo, chico!: Qué rollazo, chico, tú siempre estás igual, contándome el ligue de ayer, y yo aquí sin comerme una ro-os-ca, y encima aguantándote. Jocoso diálogo entre dos amigos, el típico perdedor que no liga nada, y el típico Don Juan que hay en todo grupo de amigos. Atentos al consejo impagable que le da el Don Juan a su amigo para ligar: te has de comprar un vaquero azúl, ya sabes cuál elegir, y sin dudar vas a ligar. ¡Y yo creía que La Oreja de Van Gogh eran pueriles!
Por un minuto de esta noche: Por un minuto de esta noche, qué sé yo, daría todo, mi vida, mi corazón. La típica balada romántica que no puede faltar en ningún disco. Ñoña e insustancial.
Te ví correr: La ví correr, ah-bah-chu-uah, llegaba tarde a clase, no sé que hacer, ah-bah-chu-uah, esto no hay quien lo aguante, estoy enamorado, y muy pronto lo sabrás, tú-u-u-uh, tú-u-u-uh... El tema emblema del disco y del grupo, primer single y gran éxito que catapultó el LP a los primeros puestos de las listas de ventas. Un tema de amor adolescente, que la verdad es que no pasaba de ser una recreación duduá de "La de la mochila azul", pero con final feliz. Le diré, hola qué tal estás, le diré, ven a baila-a-a-a-ar, le diré, quiero que sepas que yo, estoy colado por tu amor. La verdad es que tenía su encanto, en especial por esa manera de saltar de la segunda a la tercera persona a lo largo de toda la canción.
Tu chica ideal: Una canción en la que el cantante (seguramente en pleno subidón tras el éxito de la canción anterior) le habla a un amigo de la chica que le gusta y le anima a que le pida salir. Pero ojo que viene con mensaje, en realidad el que canta es bastante cabrón, acaba diciendo: no lo pienses, la tienes que llamar, si no lo haces creeme, lo siento amigo me la ligaré. Eso son amigos, sí señor...
Un tonto enamorado: Versión del clásico "Why do fools fall in love", que destrozan sin piedad.
Un sábado más: Nos vamos a bailar, es un sábado más, allí encontrarás, amigos de verdad, verás qué mogollón, eso es lo mejor. Comienza la cara B del disco con un tema retro hasta en el lenguaje: Pedimos una coca que vacila un montón, movemos las caderas y no paras de charlar, jamás. Música conservadora para una nueva generación de adolescentes que ya no veían la Bola de Cristal.
Tu sonrisa y mis sueños: Me despierto, dónde estás, no te logro encontrar, miro al suelo y puedo ver, una hoja lleva escrito adiós. Claro, tanta ñoñería, tanta cursilada, al chico le deja la novia. Pero el tío erre que erre a hacer una baladita cursi. Ford Fairlane se revolvería en su tumba si no fuera porque el muy cabrón ni siquiera está muerto.
Siempre lucharé por tu amor: Otra baladita (y van...), pero esta vez con más sentimiento, puro romanticismo adolescente. Bueno, en concreto de los de esos adolescentes de institutos americanos de los cincuenta, más fans de Paul Anka que de Elvis. Ñoña y todo, es probablemente uno de los mejores momentos del disco, fue el segundo single. Dices que son tus padres los culpables, los que prohiben que me quieras, porque creen, que no tienes edad para amar... vale, esta canción tiene una segunda lectura en clave pedófila que probablemente la mejora, pero no creo que fuese la intención del grupo.
No entiendo tu actitud: Otra canción de ruptura sentimental que confirma definitivamente el carácter conceptual del LP. Bueno, y probablemente de toda la discografía de Tennessee. La letra no es precisamente la más inspirada del disco, y dibuja una escena de ruptura totalmente alejada del mundo real: tu recuerdo, sí, tu recuerdo, asaltó a mi corazón, cuando recibí una foto, un te quiero, y un todo acabó. Definitivamente estos tíos vivían en Pleasantville.
Tu historia de amor: Cierra el álbum un tema de estribillo sin desperdicio plagado de rimas dignas de un adolescente poco inspirado, en especial esa rima final de la palabra "amor" con la palabra "amor", que no se le hubiera ocurrido jamás a Espronceda: quisiera ser tu Pigmalión, y darle forma a tu corazón, y convertir mi gran pasión, en una historia de amor sin fin, y volar contigo hasta Plutón, conseguir las llaves del amor, y besarte, besarte, mi amor. Ahí queda eso.
FRIKÓMETRO: 2,5/5 averías

martes, octubre 10, 2006

Ahora feliz, feliz

Horrenda portada que no puede impedir que el contenido sea genial
Tenía una asignatura pendiente con Chester Brown. Había leído mucho sobre él, pero prácticamente no había leído nada suyo. Diferentes circunstancias desafortunadas (incluyendo cancelaciones de pedidos del Previews) lo habían hecho era algo así como un autor maldito para mí. Así que la aparición de Ed, el payaso feliz suponía una oportunidad de oro para entrar en el universo de uno de los autores más influyentes del cómic reciente, aun a sabiendas de que se trataba de una de sus primeras obras y de que estaba bastante alejada del posterior desarrollo temático de su obra.
Pero qué más da. Aún no es el Brown experimental, ni el autobiográfico, ni el histórico, pero ya es un excelente narrador. Resulta imposible no ser arrastrado por el torrente desbordante de imaginación que supone esta sucesión de imágenes surrealistas mezcla de humor nonsense y aventuras de serie B.
Ed, el teórico protagonista, es lo de menos. Nunca ejerce como tal, ni siquiera como motor de la historia. Simplemente es la víctima de un mundo enloquecido, violento y sin sentido que le hace ser continuamente llevado de lado a lado sin llegar a entender muy bien la razón. A su alrededor, un maravilloso caos ordenado por su propia lógica en el que tienen espacio pigmeos comedores de ratas que viven en las alcantarillas, científicos locos, experimentos absurdos, montañas de mierda, médicos siniestros, manos cortadas, crímenes pasionales, violencia exagerada, santos, fantasmas, muertos vivientes, dimensiones paralelas, vampiros y la cabeza de Ronald Reagan atrapada en el pene de Ed. Todo esto trenzado de tal manera que no sólo resulta muy divertido, sino que, encima, tiene sentido.
Ojalá todos los autores hicieran obras primerizas tan buenas como ésta.
GENIÓMETRO: 4/5 eisners

lunes, octubre 09, 2006

Septiembre greatest hits

No sabía qué imagen poner, así que ahí va una del Arkanoid
Bueno, pues con algo de retraso vamos a darle el repaso mensual a la blogosfera. A ver qué ha dado de sí el mes de septiembre...

1. En Píxel y Díxel han hecho una lista de los mejores momentos de la televisión en España (en dos partes) a base de videos del Youtube. Imprescindible.
2. La gente de Milinkito sigue recopilando links. Un día recuperan a los hermanos Calatrava, otro nos ponen un top 100 de lo que se ha visto en la televisión japonesa... y entre medio les dio tiempo a buscar el verdadero orígen de la canción "Maná maná" y a documentar el hallazgo.
3. Absence nos puso un video realmente glorioso: un combate entre un marciano y una vaca. También dedicó un post a George Meyer, que es desde YA uno de mis ídolos.
4. John Tones comenzó un extenso dossier sobre Jackie Chan, interesantísimo. Permaneced atentos, sigue en marcha...
5. El Higronauta nos reseñó Campamento sangriento y su no secuela Campamento sangriento 2. Por si esto fuera poco, dedicó un post a Desmadre 75 y sus canciones gemelas. Interesantísimo.
6. Raúl Sensato sigue haciendo de su blog una ventana al mundo por la que no deja de entrar aire fresco. Este mes nos ha dado a conocer un impagable humorista argentino que hace la vida imposible a las modelos-presentadoras, y una divertidísima galería de logotomías. (Sí, podría enlazar directamente la galería sin pasar por su post, pero... ¿pa qué?)
7. Celtas, por su parte, encontró en el desván el mítico Alerta Roja y nos lo enseñó. Ah, y también nos puso el hilarante video de las versiones de la Bohemian Rhapsody por los cantantes más cargantes del mundo. Genial.
8. Claro que para documento, el video de Vocoder que rescató Pussy Galore en su blog.
9. Noel hizo su top-10 de piratas y continuó con su lista de comedias adolescentes.
10. Funebris hizo un repaso a los 10 villanos más ridículos que se han enfrentado a Spiderman. ¿Qué tomaban los guionistas?
11. Darío llevó al Pegamín la historia del enfrentamiento imposible entre Uzcudum y Gastañaga.
12. Y cerramos con un "momento nostálgico". 1977 nos puso unos anuncios de 1980 que ya parecían perdidos para siempre en la memoria. El Tubo es grande por rescatar estos horrores. Gracias a Dios la publicidad también evoluciona.

¡Hala! Al mes que viene más.

jueves, octubre 05, 2006

¿Será el café?

El tebeo favorito de Juan Valdés
Hace cuatro años, en pleno apogeo de actividad de esa gran, grandísima editorial llamada Burz Comics, los autores de la misma recibimos el encargo de hacer un cómic para promocionar una marca de café que quería repartirlo gratis en cafeterías. Con la habitual habilidad para los negocios que nos caracterizó siempre, una serie de malentendidos nos llevó a hacerlo sin cobrar, pagando la empresa tan sólo los gastos de impresión pero no el trabajo de los autores. Sí, ya sé, ya sé... éramos unos estúpidos románticos. O, como nos definió una vez el amigo Joseba Basalo, "una puta ONG".
Sabiendo que no íbamos a cobrar pero que tampoco íbamos a tener que venderlo, aprovechamos para hacer realmente lo que nos dio la gana. Probamos todas las cosas que no hacíamos habitualmente en nuestras publicaciones, probamos estilos, géneros y técnicas, incluímos desde tiras cómicas a caligramas, probamos el formato apaisado que nunca habíamos utilizado... vamos, que procuramos divertirnos, en un momento en el que ya hacía tiempo que habíamos dejado de hacer historias cortas de dos o tres páginas para publicar comic-books... el único límite era hacer cómics que giraran en torno al café, y desde luego creo que no se le podía sacar más partido al tema, abarcamos todos los espectros, desde la introspección onírica hasta la acción pura y dura. Como buenos amateurs, entregamos tarde (a fin de cuentas no cobrábamos), pero el resultado fue muy bueno. Probablemente uno de los mejores tebeos que hicimos.
Mi aportación fueron dos historias, que escaneo horriblemente y pego a continuación para vuestro goce y disfrute. Pulsad sobre las imágenes para ampliar y poder leer la historia.
Basado en hechos reales fue escrita (¡lo juro!) en el patio de una escalera de Teruel en mi breve pero intensa experiencia como aporreador de puertas a domicilio para el Círculo de Lectores, y luego dibujada en un par de días. El título no miente.



Por su parte, Los Globertrotters Atómicos fue escrita por mí y dibujada por ese gran dibujante que es David Daza, después de que él dijera que no tenía tiempo para dibujar sus páginas y yo le respondiese que le podía hacer un guión en el que sólo tuviera que dibujar dos viñetas. El título original de la historia era "So long, and thanks for all the coffee", pero David no había leído nada de Douglas Adams así que lo cambió. Cerrar el tebeo con esta historieta fue un acierto, no se me ocure un final más demoledor posible.



Snif. Echo de menos mi época de comiquero...

martes, octubre 03, 2006

Días perdidos

He estado un poco desaparecido estos días, pero es que después de un ajetreado fin de semana de visionado de cortos y celebraciones de cumpleaños he acabado haciendo la macarrada de verme por fin la segunda temporada de Perdidos, completa, en dos días.
Una serie para perderse... en ella
En estos momentos, y lo digo con algo de pánico por lo que puedan hacer los guionistas en la próxima temporada (de buenas series que la han cagado está la historia de la televisión llena), estoy mucho más satisfecho de lo que me esperaba al final de la primera, cuando dudaba de hasta qué punto se le podía sacar más jugo a la idea de la isla. Las nuevas ideas, incluyendo nuevos enigmas, nuevas localizaciones y nuevos personajes, no sólo mantienen el nivel de la primera temporada sino que incluso lo mejoran en varios momentos. Cierto es que hay algunos tiempos muertos, capítulos en los que no pasa gran cosa y flashbacks no muy interesantes, pero en general la trama avanza a una velocidad mayor, y las interconexiones que se producen en el pasado de los personajes empiezan a ser altamente inquietantes. Además tiene genialidades: la escena inicial de la temporada, por ejemplo, es de las que no se olvidan. En varias ocasiones los flashbacks se refieren a acontecimientos sucedidos ya en la propia isla, e incluso hay un capítulo dedicado por entero a explicar qué les pasó a los supervivientes de la sección de cola del avión.
Pero con el que me he rendido, acaso el mejor flashback de toda la serie, es el del último (y doble) capítulo de la temporada (que no diré ni de qué va ni en qué personaje está centrado para no spoilear, pero sí que de repente se ha convertido en mi personaje favorito): no sólo nos explica el pasado de un personaje mucho más extraordinario de lo que parecía cuando apareció, sino que nos proporciona gran información sobre la isla, explicación para algunos enigmas y nuevas preguntas e interconexiones con el resto de personajes; y, lo más importante, abre la puerta a grandes posibilidades para la tercera temporada, al conectar directamente con una última y definitivamente sorprendente escena final.
Quiero más.
GENIÓMETRO: 4/5 colombos